Amenaza híbrida [Recurso electrónico] : la guerra imprevisible XXVII Curso Internacional de Defensa, Jaca, 30 de septiembre a 4 de octubre de 201p

En la port.: Dirigido por la «Cátedra Miguel de Cervantes» Academia General Militar – Universidad de Zaragoza.

Hace tan solo unas décadas, que en una batalla, en un enfrentamiento, se conocía perfectamente al enemigo, así como su procedencia y potencial. Más recientemente con la proliferación de los actos terroristas, raramente se conoce la identidad de los individuos que perpetran los atentados, pero si se sabe quiénes son los grupos terroristas de los que forman parte, pues ellos mismos lo manifiestan públicamente.
Pero si miramos al presente y al futuro próximo, podemos observar una hipótesis mucho más peligrosa, la de no saber quién es el enemigo, dónde se encuentra, de donde procede la amenaza.
Este tipo de amenaza que se ha dado en llamar amenaza híbrida es definida por el glosario de terminología del Estado Mayor de la Defensa como: “Aquella que emplea todo tipo de instrumentos de poder, procedimientos convencionales junto a tácticas irregulares y a actividades terroristas, crimen organizado, nuevas tecnologías, ataques en el ciberespacio, presión política y múltiples tipos de herramientas de información y desinformación incluyendo las noticias falsas y la mentira en sí misma”.
Para afrontar estas situaciones, es para lo que nos debemos de preparar, dando por seguro que las mismas se encuentran permanente presentes entre nosotros, en nuestro ordenador, en nuestro móvil, intentando perpetrar ataques a redes públicas o privadas que generan grandes pérdidas económicas o incluso denegación de servicios esenciales tales como la luz o el agua, o manipulando las redes sociales para generar engaños y desorientación en los ciudadanos y con ello la pérdida de confianza en los gobiernos establecidos.
El objetivo de este curso es el de proporcionar a los asistentes la información suficiente para facilitar una concienciación sobre estas amenazas a las que ya nos enfrentamos, y transmitir el convencimiento de que la lucha contra ellas no son responsabilidad exclusiva de las Fuerzas Armadas y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, sino que es tarea de todos y cada uno de las órganos del Estado, así como de las instituciones privadas, y que como individuos la única manera de afrontarlos o colaborar de manera eficaz es disponiendo de un conocimiento de la situación a la que nos enfrentamos, lo que nos llevará, en cada momento, a través de un análisis razonado, a adoptar unos hábitos correctos de actuación.